jueves, 7 de abril de 2011

Facebook, un arma de doble filo ...

Estimados pokeros,

Se acercan las navidades y empiezan a surgir compromisos de toda índole. Cena con la familia, salidas nocturnas con los colegas del colegio, comidas de empresa, etc. Si ya de por sí las navidades son fechas con innumerables compromisos, herramientas como el Facebook hacen que las citas de la agenda se multipliquen.

Para mí, en un principio, el Facebook era una herramienta que me permitía abrir chirlas sin necesidad de salir el fin de semana. En cambio en estas fechas puede resultar un instrumento un tanto agobiante.

De momento, a día 4 de diciembre, tengo cuatro compromisos extrafamiliares ineludibles por culpa del Facebook, en los cuales aspiro a meter en caliente en sólo dos de ellos.

Vosotros diréis: "joder, dbrunson, puedes meter by the face en dos salidas e irte de guarras en las dos restantes". No, amigos, no es tan simple como eso. El año pasado, sin ir más lejos, se me metió entre ceja y ceja cepillarme a una excompañera de la universidad ... Pues bien, tuve que pasar por tres o cuatro cenas/salidas nocturnas con gente de su entorno (anulando algún que otro compromiso mío), un puto amigo invisible con gente que no veía desce hace tiempo (¿por qué siempre hay un gilipollas que se le ocurre proponer el jueguecito de los cojones?) y soportar llegar a casa borracho y dolorido (dolor de pelotas) en varias ocasiones; hasta que, por fin, la puse con un tobillo en cada mesilla a cantar villancicos (no sé si se entiende la metáfora).

¿Qué quiero decir con ésto, pokeros? Realmente no lo sé, pero me aburro un fajo y no se me ocurría un lugar mejor para exponerlo.

Que éste hilo sirva para contar vuestras experiencias con compañeras cachondas en las cenas navideñas de antiguos alumnos.

Saludos cordiales

dbrunson

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